Eso es lo primero que se nos viene a la mente al ver esas fantásticas naves aéreas. Dirigida por Paul W.S. Anderson, y supervisada por Dennis Berardi los principales retos para este proyecto fue recrear ambientes parisinos, venecianos y londinenses cuando en realidad las grabaciones fueron realizadas en su totalidad en Alemania.
Para lograr las largas y complejas tomas que se apreciarán en el film, se empleó el uso de imágenes completamente desarrolladas en CG, ambientes con acabados fotorealistas, se recrearon dobles digitales y todo fue grabado en stereo a través de cámaras Arri Alexa. Empleando una combinación de piezas del set reales y extensiones CG se creó la ilusión de los enormes barcos aéreos. Para hacerlos creíbles debieron modelar, animar iluminar y renderizar cada tornillo, cuerda y vela de manera que todo funcionara de manera cohesiva. Prestar tal atención a los intrincados detalles de los barcos proveyó de control total sobre la iluminación y facilitó la interacción ente los diversos elementos.Así mismo, debieron incorporar a su flujo de trabajo en Vray un nuevo simulador de tela, que conjuntamente con sus herramientas Houdini y Maya le permitió al departamento de efectos especiales crear sucio, destrucciones, nubes, tormentas, agua y niebla, empleando para ello numerosas simulaciones cocinadas en VRay proxy. Debido a que la mayor parte de las secuencias toman lugar en la luz diurna, resultaba más complejo alcanzar acabados foto-realistas de los ambientes y escenografías, sin embargo el uso de diversas técnicas como el empleo de modelos de iluminación basados en imágenes para facilitar estos trabajos.
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